Algunas bandas le escriben canciones al amor, estos tipos de Sabaton le cantan a las guerras (Querida Segunda Guerra Mundial, me encantas!, en especial cuando ese sujeto está en el tejado. P.D., ¿conoces a la guerra de Vietnam?), y aquí está ya lo mas nuevo de la agrupación sueca de power metal comandada por Joakim Broden a las vocales.
En esta ocasión la banda dedica temas a contingentes y héroes que lucharon en contra de las adversidades y la inferioridad numérica y tecnológica, cuando todo parece ya estar perdido, y salieron avantes o por lo menos se cubrieron de gloria en el campo de batalla, de ahí el nombre del material: The Last Stand.
A diferencia del disco pasado Sabaton (Nota mental: Sabaton = maratón de toallitas femeninas), no se limita a la Segunda Guerra Mundial del mundo, ahora vamos a atestiguar grandes gestas bélicas que comprenden desde los tiempos pre-cristianos hasta épocas modernas. De hecho, eso se aprecia en la portada del álbum.
TRACKLIST:
1. Sparta 4:24
2. Last Dying Breath, 3:22
3. Blood of Bannockburn, 2:54
4. Diary of an Unknown Soldier, 0:51
5. The Lost Battalion, 3:35
6. Rorke's Drift, 3:26
7. The Last Stand, 3:55
8. Hill 3234, 3:29
9. Shiroyama, 3:31
10. Winged Hussars, 3:51
11. The Last Battle, 3:12
12. Camouflage (Stan Ridgway Cover) (Bonus Track), 3:56
13. All Guns Blazing (Judas Priest Cover) (Bonus Track), 3:58
14. Afraid To Shoot Strangers (Iron Maiden Cover) (Bonus Track,) 7:28
Abrimos con Sparta, tema dedicado a la célebre Batalla de las Termópilas en 480 AC, librada durante la Segunda Guerra Médica, confrontando a los griegos y los persas. El paso de termópilas era un lugar estratégico por donde una fuerza de hasta 200,000 persas iban a atacar, el rey Léonidas junto a 300 espartanos y un contingente que apenas superaba los 20,000 hombres, hicieron frente y defendieron la posición durante tres días hasta que la derrota fue inevitable.
En el aspecto musical, la canción es de ritmo semilento y es dominada por los coros, aunque tienen muchos elementos electrónicos e importantes dosis de percusiones, se siente débil en el aspecto lírico, un solo de guitarra eléctrica agrega una dosis de poder.
La siguiente melodía es Last Dying Breath, dedicada al Mayor serbio Dragutin Gavrilović, quien el 7 de octubre de 1915, durante la defensa de Belgrado en la Primera Guerra Mundial, arengó a sus tropas a luchar contra las superiores fuerzas del Imperio Austro-Húngaro, con un recordado discurso: "Soldados, exactamente a las tres en punto, el enemigo será aplastado por su carga feroz, destruida por las granadas y bayonetas. El honor de Belgrado, nuestra capital, no debe ser manchado. Soldados! Héroes! El mando supremo ha borrado nuestro regimiento de sus registros. Nuestro regimiento ha sido sacrificado por el honor de Belgrado y la Patria. Por lo tanto, ya no tendrán que preocuparse por sus vidas: ya no existen. Por lo tanto, avancen a la gloria! Para el Rey y la Patria! Larga vida al Rey, Larga vida a Belgrado!"
Gavrilovic y sus tropas en 1915 |
Sabaton toma algunas frases de este discurso para elaborar su melodía, la cual es dinámica, pero al igual que el tema previo no se siente que alcance niveles épicos o momentos destacables pese a la introduccion de solos de guitarra, el final a modo de polifonías creo que le resta aún mas puntos.
Blood of Bannockburn es la tercera rola, y es uno de los sencillos promocionales del álbum, dedicada a la Batalla de Bannockburn, parte de las guerras de independencia escocesa y fue librada en 1314, cuando una formidable fuerza inglesa se lanzó contra una guarnición escocesa superándola en aproximadamente 3 a 1, y sin embargo los escoceses se alzaron con la victoria.
Como ya mencioné, esta canción es uno de los sencillos del disco. Agrega desde luego las tradicionales gaitas dándole un toque folk, la rola es dinámica, pero tengo la impresión de que le falta un poco de punch para redondear, por cierto que suena por momentos similar a Night Witches, del anterior trabajo.
Cuarta en el orden viene Diary of an Unknown Soldier, que nos lleva de nuevo a la Primera Guerra Mundial del mundo, para que observemos la Ofensiva de Meuse-Argonne en 1918, la mayor operación efectuada por el ejército norteamericano de J.J. Pershing durante dicha guerra, en la batalla hubo muchas bajas debido a la inexperiencia de los soldados, pero al final lograron imponerse a los alemanes.
Apenas 51 segundos de un discurso es lo que constituye este track, donde un soldado narra en primera persona los horrores que experimentó en la ofensiva.
Esta rola es en realidad un track introductorio para nuestra quinta canción: The Lost Batallion, durante Meuse-Argonne, la 77 División norteamericana avanzó mas allá de las líneas enemigas bajo la creencia de que sus flancos estaban protegidos, pero se encontraron de pronto encerrados por los alemanes en el bosque de Argonne, sin municiones y comunicaciones, el "batallón perdido" sufrió numerosas bajas, no solamente debido a los alemanes, sino también por culpa del fuego amigo, y sólo fueron salvados gracias a la intervención de Bel Ami, una paloma mensajera que al cumplir su misión recibió un disparo que le cercenó una pata, le atravesó el pecho y le destruyó un ojo.
Integrantes del batallón perdido |
Bel Ami |
Con todo, la paloma llegó a destino y además de salvar al batallón con su mensaje, sobrevivió a sus heridas.
La canción es otro de los sencillos que ha sido mostrado para promocionar el disco, una suerte de balada dominada fundamentalmente por los coros que sin embargo me parecen algo caóticos ya que traen consigo cambios de ritmo en algunos puntos, pero por lo demás la rola es pasable.
El siguiente track es Rorke's Drift, que hace referencia a la batalla del mismo nombre, que se llevó a cabo en la actual Sudáfrica en 1879, una fuerza de nativos zulús se lanzó contra un puesto colonial británico con apenas 200 defensores atrincherados, sin embargo pese a la inferioridad, los ingleses tenían consigo las armas de fuego.
Musicalmente hablando, esta canción nos trae (por fin) un buen uso de guitarras, bajos y percusiones y se trata de una rola dinámica donde además Broden hace un uso de la voz al que nos tiene acostumbrados, hay mucha energía, mucha furia.
Ahora daremos paso a la rola que pone nombre al disco: The Last Stand, y con ella Sabaton rinde tributo a nada menos que la Guardia Suiza, que en 1527 hizo frente al ejército del Duque de Borbon que se dispuso a saquear Roma, 189 guardias suizos frenaron a las hordas borbónicas dando tiempo así a que el Papa Clemente VII para escapar de la ciudad.
Aunque la melodía no se usó como single, fragmentos de ella pudieron escucharse junto a los sencillos y en otros materiales promocionales, la canción es a mi gusto la mejor del album, tiene power, y sus coros son recordables y pegajosos.
Sigue Hill 3234, con ese número se conoció una loma donde en 1988 se enfrentó una fuerza de 39 paracaidistas de la poderosa e indestructible Unión Soviética, contra dos centenares de rebeldes afganos en el marco de la invasión soviética a ese país.
La canción trae buenas dosis de trash y power.
La colina 3234 |
Ahora vamos con la que se convirtió en el tercer sencillo promocional: Shiroyama, y con ella nos vamos al Japón que iba de la epoca feudal a la edad moderna, 1877 es el año en que ocurre la Rebelión Satsuma, liderada por Saigo Takamori y un grupo de antiguos samuráis, descontentos por la apertura que el gobierno imperial hacía a occidente y que significaba que los samuráis estaban al borde de la extinción. La Batalla de Shiroyama fue el último enfrentamiento de dicho conflicto, la poderosa Armada Imperial Japonesa rodeó a los rebeldes y los fue diezmando poco a poco a base del uso de la artillería, hasta que la superioridad imperial fue de 60 a 1, al final, Saigo y sus seguidores se lanzaron en una gloriosa carga de sables contra las fuerzas imperiales, dotadas de mosquetes y otras armas de fuego, para así morir con honor.
La rola tiene mucha dinámica, haciendo un buen uso de la guitarra y los habituales sonidos electrónicos.
En el décimo puesto viene una rola que se filtró a internet si no me equivoco, y es Winged Hussars, nombrada así en honor a los Húsares Alados polacos, un vistoso cuerpo de caballería que usaba unas enormes alas en la espalda como parte de su armadura. En 1863 Viena fue sitiada por los turcos y a su defensa acudieron las naciones europeas. El sitio era irrompible hasta que aparecieron los húsares polacos y en 30 minutos acabaron con 20,000 elementos turcos, decidiendo así el curso de la batalla.
La rola si bien es lenta tiene mucho power, por ahi los coros son bastante repetitivos, pero por alguna razon son pegajosos.
Para cerrar tenemos The Last Battle, que hace referencia a la Batalla por el Castillo Itter, en mayo de 1945, y constituye un extraño caso donde los alemanes pelearon del lado de los norteamericanos. Don Hitler ya se había suicidado pero aun había fanáticos que no se rendían, en el Castillo Itter había prisioneros franceses de alto nivel incluyendo un tenista famoso. El grupo estaba siendo asediado por las fuerzas alemanas fanáticas, pero en ultima instancia un combinado del ejercito americano y un grupo de alemanes desertores acudieron en su defensa.
alemanes y norteamericanos combaten juntos en el castillo Itter |
Esta rola parece tener elementos del symph metal que no sé porqué me recuerdan al Nightwish de hace varios años, es una cancion agradable.
Finalmente como bonus tracks, Sabaton nos trae tres covers: Camouflage de Stan Ridgway, All Guns Blazing de Judas Priest, y Afraid To Shoot Strangers de Iron Maiden, estas dos últimas bandas siempre citadas como influencias musicales de Sabaton.
Hasta aqui el recorrido musical de este trabajo, tengo que decir que en esta ocasion no me ha gustado del todo el trabajo de la banda, sus canciones suenan muy repetitivas y monótonas si las comparamos las unas con las otras, incluso hay rolas que tienen claras reminiscencias a canciones de discos pasados, las canciones tienen más o menos el mismo estilo musical y eso aburre, especialmente en los primeros tracks, por ahi de la segunda mitad el álbum levanta un poquito pero fundamentalmente es lo mismo.
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