Anteriormente había posteado una serie de largas entradas reseñando el desempeño de la aviación en las diversas etapas de la Revolución Mexicana (Ver http://drsamuelbanda.blogspot.mx/2012/11/la-aviacion-en-la-revolucion-mexicana.html), y ahora, como parte de esa inercia, presento este trabajo un poco más modesto sobre el casi desconocido conflicto cedillista que ocurrió en San Luis Potosí, de 1938 al 39, y en el que nuevamente el arma aérea jugó un papel importante.
El General Saturnino Cedillo es un clásico ejemplo de aquel dicho de que "la historia la escriben los vencedores", pues 70 años de censura institucional han borrado del colectivo mexicano todo rastro de los conflictos que siguieron a la Revolución Mexicana. La imagen de Cedillo ha sido retirada de la historia y donde no lo ha sido, generalmente se le devalúa o se le sataniza, así que quizá nunca podremos entender en su completa dimensión a este personaje, un hombre que fue leal a sus propios ideales y su gente, rebelándose contra todo aquel que pudo.
UNA HISTORIA DE
SUBLEVACIONES
Saturnino
Cedillo nació en el Rancho Palomas, Ciudad del Maíz, San Luis Potosí,
en 1890. Su historia estuvo caracterizada por las sublevaciones. En 1911
se unió al maderismo bajo las órdenes de su hermano Magdaleno
Cedillo. El 17 de noviembre de 1912, junto con sus hermanos tomó Ciudad del
Maíz y secundó el movimiento de Pascual Orozco contra el gobierno del
propio Francisco I. Madero.
En enero de
1913, junto a sus hermanos Magdaleno y Cleofas, asaltaron, en la estación de
Las Tablas, el tren procedente de Tampico, y se apoderaron de 800 mil pesos que
pertenecían al gobierno; con esa suma Saturnino pretendió comprar armas en
Estados Unidos, pero fue arrestado y encarcelado. Para fines de febrero, y con
Madero muerto tras el golpe de Huerta, Cedillo pudo recobrar su libertad.
No pasó mucho
tiempo antes de que Saturnino emprendiera una nueva aventura: la rebelión
contra Huerta, operando en San Luis Potosí y se unieron a las fuerzas de
Carranza, al triunfo de los Constitucionalistas en 1914, vino la ruptura entre
el bando de Carranza y Obregón contra los villistas y Zapatistas, simpatizando
con los ideales agrarios de estos últimos, se unió a ellos.
Cedillo y sus
hermanos combatieron durante 1915 con las fuerzas de Villa en la región de la
Huasteca, especialmente en las Batallas de El Ébano y Celaya, que se saldaron
en derrotas. Es probable que durante estos hechos de armas Saturnino Cedillo
tuviese su primer encuentro con la aviación, cuando sus fuerzas tuvieron que
enfrentarse a los bombardeos de los aviones constitucionalistas, por lo que no
fue un encuentro precisamente agradable.
Monoplanos constitucionalistas en la batalla de El Ébano en 1915, para más información ver: http://drsamuelbanda.blogspot.mx/2012/11/la-aviacion-en-la-revolucion-mexicana_14.html |
Cleofas murió
por las heridas en El Ébano en 1915, y Magdaleno durante un enfrentamiento en
Ciudad del Maíz, en 1917. El villismo y el zapatismo se extinguían a la muerte
de sus líderes.
SOFOCANDO
REBELDES Y REPARTIENDO TIERRAS
Cedillo fue
claramente anticarrancista, por lo que no dudó en unirse a Álvaro Obregón
cuando éste tomó el poder asesinando a Carranza en 1920. Así, Saturnino fue un aliado
del “Grupo Sonora”, del que formaban parte Obregón, Benjamín Hill y Plutarco
Elías Calles, este último el personaje central que controló a los Presidentes
Adolfo de la Huerta, Pascual Ortiz Rubio y Abelardo L. Rodriguez.
Calles, quien se
hizo llamar “El Jefe Máximo” de la Revolución, fue el hombre que estaba detrás
del poder, y de hecho, había sido un impulsor de la aviación, logró crear una
fuerza aérea moderna y poderosa para su tiempo.
En ese tiempo,
Saturnino gozó de la simpatía del gobierno de Calles. Se le integró en el
Ejército, sin embargo, gozó de licencia y junto con sus tropas manifestó su
deseo de retirarse para formar las llamadas “colonias agrícolas” en su estado
natal.
Fueron 13 las
colonias militares agrícolas establecidas: los soldados se retiraban a la vida
del campo, cada colonia ocupaba de 50 a 200 campesinos, y se les repartían 30
hectareas de riego, 30 de temporal y 150 de pastizales. Los propietarios podían
hacer libre uso de lo sembrado.
Mientras tanto en su calidad de soldado, tuvo
que reportarse a las órdenes de Calles: luchó contra la rebelión de Adolfo de
la Huerta en 1923, y recibió el grado de General de División en 1928. Se le
puso al frente de las fuerzas que combatieron a los Cristeros de 1926 a 1929.
Derrotó en
combate a las fuerzas cristeras del General Enrique Gorostieta, quien murió en
la batalla de Atotonilco. También dirigió a las tropas contra las rebeliones de
Francisco R. Serrano y Arnulfo R. Gómez en 1927 y la rebelión escobarista en
1929, en este periodo, colaboró de cerca con el Primer Regimiento Aéreo del Ejército
Mexicano, equipado con los nuevos aviones Vought O2U Corsair que el gobierno
había comprado en Estados Unidos, los mismos desempeñaron un papel fundamental
para someter a los rebeldes de Escobar.
Aviones Chance Vought Corsair duranta la rebelión de José Gonzalo Escobar |
EL ACERCAMIENTO
A LA AVIACIÓN
El 6 de abril de
1926 estuvo entre aquellos que recibieron al famoso piloto Pablo L. Sidar
cuando hizo escala en San Luis Potosí como parte de su vuelo México –Saltillo.
El 10 de julio de 1927 se subió por primera vez a un avión junto al gobernador
de San Luis Potosí Abel Cano y el General Francisco Carrera Torres, en un avión
llamado “Potosino” que el Ejército había obsequiado a Sidar.
De 1927 a 1931
fue Gobernador de San Luis Potosí, fue durante este tiempo que se acercó a la
aviación, estableció la Escuela Civil de Aviación de una manera informal como
pretexto para crear un campo de deportes, maniobras militares y la utilidad del
correo aéreo. Poco a poco se fueron consiguiendo aviones y pilotos, además se
establecieron rutas aéreas regulares entre San Luis Potosí y varias partes de
la República.
También impulsó la creación de la Compañía Constructora Aeronáutica de San Luis, que en 1930 produjo un avión llamado “Triunfo Potosino”, que al parecer no voló. Luego en 1932 también se produjo el avión Sea Teul, diseñado por el ingeniero Antonio Sea.SEA Teul |
Una vaga
referencia vincula a Cedillo con lo que puede considerarse el primer secuestro
aéreo de la historia, cuando el piloto Howard “Doc” DeCelles, de la línea
Transportes Aéreos Transcontinentales, realizaba un vuelo de correo entre San
Luis Potosí y Torreón, Coah. en diciembre de 1929. Antes de despegar el
gobernador Cedillo y un grupo de hombres se le aproximó y lo obligaron a
llevarlos con él a punta de pistola, voló en la dirección que Cedillo le indicó
(mediante un traductor) y aterrizó en un camino desconocido donde los hombres
descendieron. Le mantuvieron en custodia unas horas hasta que Cedillo se
despidió con un “buenos días” y DeCelles continuó con su vuelo.
Hubo una mujer
que influyó decisivamente en la vida de Saturnino: su sobrina María Marcos
Cedillo, mujer aventurera que fue, posiblemente, la primera mujer piloto
mexicana (tal vez la segunda si se toma en cuenta el relato de Dolores Castillo, ver http://drsamuelbanda.blogspot.mx/2012/11/la-aviacion-en-la-revolucion-mexicana_18.html).
Las pocas referencias a María Marcos la citan como hermana de Saturnino, sin
embargo, fue hija de Homobono Cedillo, hermano de Saturnino, siendo entonces su
sobrina.
Se sabe que
cuando su tío estableció la Escuela, María conoció a Florence Burnes,
estadounidense que arribó al estado en 1930, siendo la primer mujer en
sobrevolar el estado, y causó una profunda impresión en la joven Cedillo, que
de inmediato entendió que su futuro estaba en el aire.
Así, para 1931 en
la mencionada Escuela Civil de Aviación ya existían además de los instructores
de vuelo, mecánicos y varios alumnos, entre ellas, María Marcos Cedillo, quien
al poco tiempo ya realizaba vuelos de grandes distancias.
La afición aérea
de María, curiosamente, no era compartida por su tío el general Saturnino,
quien a pesar de haber instalado la Escuela de Aviación, no sentía ningún
afecto por “esas máquinas del infierno”, como él las calificaba, esto inspiró a
la ya piloto a bautizar a su avión Avro 540K como “El Ángel del Infierno”,
leyenda que fue pintada a mano por la propia mujer en los costados de la
aeronave.
Otras fuentes,
por el contrario, citan que Cedillo en realidad gustaba de la aviación, prueba
de ello es el impulso que le dio a la industria aérea. Lo más probable es que
el General Cedillo entendiera perfectamente las ventajas del avión, pero
tuviera una aversión natural a volar, cosa que luego sería determinante.
En 1933, María
Marcos Cedillo perdió la vida cuando su Ángel del Infierno no se pudo recuperar
de una acrobacia y se precipitó al suelo. La pérdida afectaría profundamente a
Saturnino.
NUEVOS AIRES DE
REBELIÓN
Ese mismo año
Saturnino Cedillo colaboró activamente usando sus influencias y movilizando a
la población potosina para votar por el General Lázaro Cárdenas, quien ganó y
llegó a la Presidencia de la República en 1934. Calles pensó que Cárdenas sería
tan fácil de controlar como los anteriores presidentes, pero éste era
diferente, de marcadas ideas socialistas e izquierdistas, Cárdenas se convirtió
en un obstáculo en los planes de Calles, las diferencias terminaron cuando
Lázaro Cárdenas finalmente lo expulsó del país.
Personajes centrales en la política mexicana: Lázaro Cárdenas y Plutarco Elías Calles, en medio de ambos está Saturnino Cedillo |
Saturnino
Cedillo aún gozaba del favor gubernamental, y en 1935 es nombrado Secretario de
Agricultura y Fomento. Sin embargo empezaban las diferencias con Cárdenas,
especialmente en lo referente al reparto agrario que el Presidente hizo, algo incompatible
con la visión de Cedillo y sus colonias agrícolas militares. Tambien sus
ideologías políticas eran contrarias, especialmente por el marcado
anticomunismo de Cedillo frente al tono socialista de la administración de
Cárdenas, y a Cedillo no le parecía nada bien el plan para nacionalizar los
yacimientos petroleros.
Saturnino Cedillo |
La expropiación
petrolera que Lázaro Cárdenas decretó el 18 de marzo de 1938 le costó al país
unos 450 millones de dólares en inversiones norteamericanas e inglesas. Boicots
por parte de los gobiernos afectados provocaron la abrupta caída del peso, una
crisis económica se desató.
Ya desde 1937 se
venía gestando una rebelión, y con la crisis desatada por la expropiación del
petróleo, Cedillo vio aquí su oportunidad, era el momento de hacerle frente
abiertamente a Cárdenas, y empezó a fraguar un movimiento armado. Los miembros
de las colonias agrícolas militares volverían a la acción siguiendo fielmente a
su líder.
Se dice que
detrás de las intenciones de Cedillo se escondía el nazismo, y si bien es
cierto que hubo algunos contactos con la Alemania de Hitler desde 1937, nunca
hubo nada formal, aunque se acusó oficialmente a Cedillo de formar la “quinta
columna de los nazis en México”, y ambos grupos compartían su aversión al
socialismo y comunismo, la realidad era que a los nazis no les convenía, por el
momento, apoyar una rebelión en México, especialmente cuando la nación mexicana, necesitada de dinero y boicoteada por Estados
Unidos e Inglaterra, vendía su petróleo sin restricciones a un Tercer Reich
cada vez más sediento del recurso, el expansionismo nazi en Europa empezaba a
mover sus piezas.
El gobierno
empezó a vigilar los movimientos de Cedillo y sus cada vez más numerosas
tropas, una de las acciones fue nombrarlo Jefe Militar en Morelia en abril de
1938, esperando así alejarlo de sus leales hombres en San Luis Potosí, Cedillo
se negó y en cambio pidió su baja del Ejército el 8 de mayo, aduciendo
problemas médicos, los cuales por cierto, fueron certificados por el Dr.
Ignacio Morones Prieto, uno de los médicos más reconocidos en la historia nacional. La separación le fue concedida, pero los aires de rebelión ya
soplaban fuerte en el estado potosino.
Hasta el
gobernador del estado, Mateo Hernandez Netro, parecía estar del lado de los
sublevados, cuando se dio a conocer un manifiesto firmado por él donde se
declaraba San Luis Potosí como “sustraído de la Federación” y desconocía al
Presidente Cárdenas. Sin embargo dijo desconocer el documento.
LAS HOSTILIDADES
El 18 de mayo
llegó Lázaro Cardenas a San Luis Potosí a bordo del tren presidencial “Olivo”,
ahí de inmediato calificó la actitud rebelde de Cedillo, y se organizó al
Ejército para su captura. Por supuesto las tropas cedillistas no se quedarían
de brazos cruzados y los enfrentamientos empezaron a lo largo del estado.
Entre las
fuerzas comisionadas estaba el Primer y Segundo Regimientos Aéreos de la Fuerza
Aérea Mexicana, que en su flota incluían una nueva versión del Corsair: el V99M,
además de aviones Fleet 21M recién adquiridos. Entonces se organizó un
Escuadrón Aéreo Mixto que partió con 17 pilotos al estado de San Luis Potosí al
mando del coronel Alfredo Lezama. Se desplegaron 10 aviones Corsair y 3 aviones Fleet. Un avión Stinson matricula civil XB-ABB
sirvió de apoyo y enlace.
Fleet 21M |
Vought V99 Corsair, nótense las diferencias con el O2U mostrado más arriba |
Avion Stinson de la Fuerza Aérea Mexicana |
Además de sus
nuevos aviones, los pilotos contaron con un buen equipamiento y logística, así
como la seguridad de disponer de paracaídas en combate, los que se usaban de
manera rutinaria desde 1933. Pero lo que quizá representó un interesante reto
para la aviación militar fue el hecho de que las fuerzas cedillistas contaban
con su propia fuerza aérea, con la que amenazaban petulantemente acabar con los
pilotos militares.
Los aviones rebeldes,
piloteados por mercenarios estadounidenses (aunque también se mencionan pilotos
mexicanos), eran un grupo de biplanos Waco, Alexander Eagle Rock A1 y A4 y
Travel Air 2000, aparatos viejos que no eran rivales para los aviones
militares, con una excepción que dio a las fuerzas federales unos cuantos
dolores de cabeza, y es que los rebeldes habían adquirido, por casi 30,000
dólares, un par de monoplanos de cabina cerrada Howard DGA-8 de apariencia muy
moderna, y muy veloces. Estos aparatos al parecer, habrían sido financiados por
industriales petroleros estadounidenses descontentos por la expropiación, y
contrabandeados por el norteamericano Cloyd Clevenger en septiembre de 1937,
las matrículas de estos aparatos eran NC-18282 y NC-18283, coincidentemente,
los números de serie fueron 82 y 83.
Avion Alexander Eaglerock,. Este en particular perteneció a Cloyd Clevenger |
Travel Air 2000 como el empleado por las fuerzas cedillistas. Solo para propósitos ilustrativos. |
Biplano Waco. igualmente solo para ilustrar, no es uno que haya volado con las fuerzas de Cedillo |
Uno de los 2 Howard DGA-8 de la flota cedillista en algun lugar de San Luis Potosí, este avión era, a todas luces, muy superior a lo que la Fuerza Aérea Mexicana podía ofrecer. |
Se contaba
también con Andrés Gómez Unga, experto en explosivos, quien fabricaba bombas de
28 Kg para ser lanzadas a mano desde los aviones.
Saturnino Cedillo contó además con su propia estación de radio privada, desde la que coordinaba a sus tropas e informaba a la población. Aquí se ve la antena emisora. |
El mismo día que
Cárdenas llegó por tren a San Luis Potosí, Cedillo huyó a la serranía del
estado en uno de los Howard.
Aunque no eran aviones de combate, los Howard
fueron usados en una acción audaz al atacar el campo aéreo federal repleto de
aviones, la tarde del 21 de mayo de 1938. Los Howard lanzaron cuatro bombas de
28 Kg sobre los sorprendidos pilotos en el puerto aéreo de San Luis Potosí, con
tan mala suerte que ninguna dio en el blanco, ocasionando sólo el feroz
despegue de los V-99M intentando en vano alcanzar a los veloces aviones
cedillistas, que con la ventaja de la altura, habían desaparecido en el
horizonte cuando los Corsair apenas ascendían unos cuantos pies, dejando como
principal daño, una fuerte sensación de frustración.
Los aviones federales en su base en el Puerto Aéreo de San Luis Potosí, en primer plano un Corsair, detrás un Fleet y al fondo una fila de Corsairs. |
Ese mismo día
los Fleet y Corsair lanzaron periódicos sobre las poblaciones de San Luis
Potosí con el fin de que los campesinos leyeran las notas y así “orientarlos”
sobre el conflicto.
También los
cedillistas se valieron de la “propaganda aérea”, el mismo día 21, mientras
Cárdenas estaba en un acto público por su cumpleaños, un avión cedillista pasó
arrojando volantes, el 25 de mayo se reportó que un “veloz” monomotor
(posiblemente un Howard) voló a baja altura sobre Tampico y distribuyó el
manifiesto del gobierno potosino, donde se nombraba a Cedillo “Jefe del
Ejército Constitucional del Estado”, además daba 15 días de plazo para que los
soldados del Ejército Mexicano se le unieran, con un aumento de sueldo y
ascenso al rango inmediato superior, de lo contrario se les considerará
traidores.
Otro avión
cedillista habría arrojado 2 bombas cerca de la Estacion de Las Tablas,
mientras que uno más protagonizó un ataque un día después, arrojando 4 bombas
sobre una finca cerca de la residencia donde se alojaba Lázaro Cárdenas.
3 pilotos
mercenarios norteamericanos fueron sorprendidos en Nuevo Laredo, Tamps. Cuando
intentaban cruzar la frontera para comprar otros 2 aviones para Cedillo, se informó
que serían ejecutados, pero que posiblemente serían indultados por Cárdenas, lo
cual probablemente ocurrió.
Este Vought Corsair en particular sufrió daños en vuelo, no por las fuerzas cedillistas |
Por parte de la
Fuerza Aérea Mexicana, se montaron patrullas de combate con la esperanza de
encontrar a los aviones rebeldes y derribarlos, al tiempo que al menos un V-99M
fue apresuradamente camuflado para evitar que fuera un blanco fácil en caso de
otra sorpresiva visita de los Howard, mientras los pilotos mercenarios,
borrachos en las cantinas, retaban a un duelo aéreo a los pilotos militares,
duelo que nunca ocurrió.
V99M Corsair No. 38 "camuflado", se reporta que al parecer se derramó aceite sobre el aparato y luego se le cubrió de tierra para así hacerlo confundir con el paisaje |
El Escuadrón mixto que dio caza a las tropas cedillistas, se nota que el avión más cercano posee un camuflaje más elaborado que el anterior |
Lo que sí sucedió es que el ejército castigó con
dureza a las tropas del general Cedillo, batiéndolas en constantes piques de
ametrallamiento y bombardeo, en las localidades de Río Verde, Villa Reyes,
Jaral de Berrio, El Salto, El Meco y El Zenzontle, constando el uso durante la
campaña, de 182 bombas de fragmentación y 2,480 cartuchos de ametralladora por
parte del Escuadrón Aéreo Mixto. Los últimos reductos del cedillismo caían uno
tras otro.
Preparándose para el combate, nótese el portabombas bajo el ala del Corsair |
Saturnino
Cedillo se veía cada vez más acorralado, tuvo la oportunidad de escapar en uno
de sus aviones Howard, cuando las fuerzas federales se le aproximaron en Ciudad
del Maíz, sin embargo, puede ser que influyera más su supuesta aversión a esas
“maquinas del infierno” que años antes le arrebataran la vida a su sobrina.
Cedillo decidió
mejor huir a caballo, 8 meses anduvo a salto de mata en la Sierra de la
Ventana, hasta finalmente ser abatido el 11 de enero de 1939 por las fuerzas
del ejército, numerosas versiones corren en torno a su muerte.
Espectral imagen del General Cedillo durante sus meses prófugo, aquí se acerca a tomar agua |
EPILOGO
Los aviones
Howard DGA-8 fueron incautados por las fuerzas armadas y puestos al servicio de
la Fuerza Aérea Mexicana, al menos uno contó con el numeral 69 durante su
servicio. Del mismo modo los biplanos Alexander Eaglerock pasaron también a las
filas de la Fuerza Aérea. Uno de los aviones, no hay referencia a cuál, pero muy seguramente un Howard, se
accidentó el 22 de julio de 1938 en el estado de Campeche, perdiendo la vida
varios directivos ferrocarrileros, entre ellos el Ing. Francisco Escárcega Márquez. El municipio de Escárcega, Campeche, tomó este nombre en su honor.
Cloyd Clevenger,
quien vendió los aviones a Cedillo, fue encarcelado tiempo después en Estados
Unidos, cuando se descubrió que también había contrabandeado aviones a España
vía México, violando así la neutralidad norteamericana en la Guerra Civil
Española, estos aviones, los Bellanca 28-90 Flash, eran modernos monoplanos de
caza muy superiores a su tiempo, y estaban destinados a las fuerzas
republicanas españolas, los aviones no alcanzaron a llegar debido a la derrota
a manos del General Franco, y se quedaron en Mexico, donde formaron parte de la
Fuerza Aérea, protagonizando un par de accidentes pues los pilotos no estaban
acostumbrados a esa clase de aparatos, preferían los lentos pero estables
biplanos como el Corsair, que siguió en activo varios años más, incluso en
1942, ya en la Segunda Guerra Mundial, uno de ellos atacó lo que se pensó era
un submarino japonés frente a las costas de Baja California.
Aunque la
rebelión cedillista terminó tan rápido como empezó, realmente vino a terminar
hasta 1962, cuando Epifanio Duque, uno de los hombres de Cedillo, finalmente se
rindió tras haber sido dado por muerto y vivir por años a salto de mata en la
serranía.
Estimado Dr. Samuel Banda, nuevamente le reitero mis felicitaciones por este y sus demas articulos relacionados con la Historia de la aviacion Mexicana. En este de la Rebelion Cedillista y Escobarista, quiero darle mi opinion sobre la Foto del primer avion en San Luis Potosi llamado el Condon, el cual por el motor Jupiter podra ser un avion Bristol.
ResponderEliminarTambien quiero decirle que las fotografias y los cromos de los aviones Corsair son muy ilustrativas me encantaria poder saber que libros utilizo en su bibliografia.
ResponderEliminarSoy modelista y todo lo relacionado con la Historia de la Aviacion Mexicana me encanta.
Me encantaria poder contactarlo de alguna manera por correo electronico..
Saludos.
Azcarate
Saludos Azcárate.
EliminarPrimero que nada agradezco su visita y sus comentarios.
Quiero creer que es el mismo Azcárate que participa en los foros de las fuerzas armadas mexicanas, yo mismo sigo esos foros aunque raramente escribo en ellos.
En cuanto a las fuentes de esta entrada, está el libro "Latin American Air Wars and Aircraft, 1912-1969" de Dan Hagedorn, del que solo cuento con la edición de cromos e imágenes y no he podido obtener los textos.
La imagen del Howard DGA-8 en blanco procede de una revista Timelife de la época que estaba disponible en Google Books, pero no sé si siga en ese sitio ya que no volví a encontrarla.
En cuento a la información documental, este año la revista Relatos e Historias de México destinó un número al Gral. Cedillo, con una breve biografía de María Marcos Cedillo, otra fue una mención que se hace del conflicto en un articulo de América Vuela dedicado a los Corsarios, además hay muchas páginas en internet donde pueden encontrarse unas pocas líneas, ya no tan fiables, pero que al final uno tiene que ir juntando y armando una especie de rompecabezas.
Le recomiendo también una visita a la hemeroteca de El Siglo de Torreón (creo que es una de las pocas disponibles online con libre acceso), donde puede ud. consultar muchas noticias relacionadas al conflicto.
Saludos de nueva cuenta.
Le dejo mi correo
samuel_bbj@hotmail.com
EXCELENTE ARTÍCULO. FELICIDADES.
ResponderEliminarAllá por los 80s conocí a un piloto Cedillista. Se vió involucrado sin querer y quedó del lado de ese bando. Me comentó que posteriormente y "aclarada" la situación, reingresó a la FAM. Se retiró de general. Se llamaba Gonzálo Acosta Fernández. Escribió un libro que no fue publicado por miedo a las consecuencias, con suerte aún lo tengan los familiares.
http://www.mexicanaviationhistory.com
Muy interesante. Gracias.
ResponderEliminarinteresante ,desconocia el inicio de la aviacion en las gestas mexicanas, tenia el conocimiento de la hermana de cedillo , y vuelvo a decir, no son reconocidas, aunque sean una mala imagen para el sistema, digo yo .
ResponderEliminargracias por su gran aportacion para su servidor
Dr.Samuel Banda,va mi felicitación por su muy explícita reseña sobre esta parte de la historia ,frente al papel de Saturnino Cedillo. Mtro.Manuel Sánchez Quiñones
ResponderEliminarOjalá en otra entrega pudiera compartirnos cuáles fueron las colonias agrícolas que fundó el gral Cedillo!
ResponderEliminarTuve la fortuna de en mi niñez vivir en la Col. El Meco,S.LP, asimismo comentarle que en el mpio de Ocampo ,Tamps existe otra Col.Agricola,llamada Sta Maria de Gpe.(acaso también la fundó el).